Un centenar de personas, entre ellas inmigrantes con niños, se congregaron el miércoles frente al Capitolio estatal de Misisipí para manifestar su oposición a un proyecto de ley contra la inmigración no autorizada que muchos califican como injusta e inhumana.
El proyecto es similar a la ley de Alabama de 2011, incluyendo los capítulos que exigirían a a las escuelas públicas verificar el estatus migratorio de los estudiantes. La ley de Alabama se considera una de las más duras medidas contra la inmigración en el país, y algunas partes fueron bloqueadas por tribunales federales, incluyendo la revisión del estatus de los estudiantes.
Si el proyecto se convierte en ley, podría conducir al encasillamiento racial, lo cual provocará la huida de hispanos de Misisipi y perjudicará la cosecha, pues no se podría recoger, según sus opositores.
"La intención del proyecto es ahuyentar a las personas de Misisipí, los latinos en particular. Y a eso le llamamos limpieza étnica" , dijo Bill Chandler, director de la Alianza por los Derechos de los Inmigrantes en Misisipi, durante el mitin en la rotonda del Capitolio.
El proyecto de ley, patrocinado por 15 miembros republicanos de la Cámara estatal, obligaría a los inmigrantes a portar documentos para demostrar que están con autorización legal en Estados Unidos. También permitiría a la policía verificar el estado migratorio de las personas.
El proyecto aguarda debate en dos comités, el judicial y el de educación. Si sobrevive, como se espera, pasará a debate en el pleno de la Cámara.La principal patrocinadora de la norma, la republicana Becky Currie, opinó que el gobierno federal no ha aplicado las leyes de inmigración, y que su objetivo es asegurar que todos tengan los documentos necesarios para estar en Estados Unidos.
"No va a haber cultivos abandonados y muertos en la vid" , dijo Currie. "Se puede venir aquí y trabajar, pero siendo legal" .Currie no estaba en el mitin el miércoles porque asistía a reuniones legislativas, dijo. Ella ha escuchado las críticas al proyecto, y cree que los detractores están tergiversando sus intenciones.