Después de pasar 13 años en la cárcel, un pastor llamado Bounchan Kanthavong, que vive en Laos, fue puesto en libertad. Este había sido condenado en 1999 por traición a la patria y por ir contra la seguridad nacional.
Después que recibió una formación bíblica comenzó a compartir su fe con la gente que llegaba a su tienda de ropa.
Con su testimonio llevó a más de 70 personas a que aceptaron a Cristo.
Las autoridades le pedían a Kanthavong, detener la propagación del cristianismo, pero él se había convertido al cristianismo desde 1997, así que su oficio lo utilizaba para hablar de Jesús.
El gobierno tenía miedo, porque para ellos el cristianismo, es una religión extranjera que podría allanar el camino con una cultura extraña entre la gente, algo que fue duramente criticado.
El gobierno decidió que para contener la evangelización, decidieron condenar a la cárcel, al comerciante y pastor.
Su esposa, Sengkham, continuó el trabajo de evangelismo y llegó a formar una comunidad cristiana en Laos que ha crecido y que actualmente tiene 3 mil creyentes. Ahora que Bounchan, está en libertad necesita las oraciones de todos los cristianos, porque mientras estuvo encarcelado su salud se deterioró considerablemente. Oren por él, su esposa, cinco hijos y los cristianos en Laos.
Laos es uno de los países más pobres del Sudeste Asiático. El nombre oficial es República Democrática Popular Lao. Limita al este con Vietnam, al oeste con Tailandia, al sur con Camboya y al norte con la China y Myanmar.