El pastor Bounchan Kanthavong fue puesto en libertad el 2 de febrero de este año. Había sido declarado culpable y condenado en el año 1999 a doce años prisión acusado de traición a la patria y por ir contra la seguridad nacional.
Los únicos "crímenes" por los cuales el pastor fue condenado fue haber compartido su fe cristiana con las personas que vinieron a su tienda de ropa. El testimonio de Bounchan llevó a más de 70 personas a aceptar a Cristo.
Él aceptó a Jesús en 1997, cuando pasó una noche con cristianos durante un viaje de negocios. Cuando regresó a su ciudad natal, comenzó a compartir el Evangelio y a dar testimonio de su nueva fe evangélica.
Las autoridades del país advirtieron Bounchan que debería dejar de creer, practicar y difundir el cristianismo. Se le ordenó detener todas las actividades cristianas en su tienda.
Ellos estaban preocupados de que la gente se convierta al cristianismo, que es considerado una fe extranjera, y que si recibian el cristianismo también lo harían con la cultura extranjera.
Bounchan está casado y tiene cinco hijos. Tras su detención, su esposa asumió el liderazgo de la comunidad cristiana, que creció aún más en esta ocasión en que el pastor fue arrestado.
Bounchan fue puesto en libertad porque su salud se había deteriorado mucho durante el tiempo que permaneció en la carcel. Oremos por Bouchan para que pueda recuperarse pronto y volver a actuar en su ministerio. Oremos también por su salud, que se deterioró en los últimos años en la cárcel.
