El jefe político del Movimiento de Resistencia Islámica (Hamas), Khaled Meshaal, partió anoche de El Cairo sin conseguir novedades en sus conversaciones con el dirigente de Al-Fatah Moussa Abu Marzouk para discutir la posibilidad de avanzar en el proceso de reconciliación.
Medios egipcios dijeron que funcionarios palestinos reconocieron que la reunión "no produjo nada nuevo" en lo concerniente a crear un Ejecutivo de unidad, tal como habían acordado aquí en mayo de 2011, y en Doha, a comienzos de febrero pasado.
El grupo islamista, que controla la bloqueada Franja de Gaza desde junio de 2007, y la organización que lidera Mahmoud Abbas, en la ocupada Ribera Occidental, también están comprometidos a impulsar elecciones presidenciales y parlamentarias.
Según las fuentes, la reunión de dos horas del miércoles en la noche fue un nuevo intento por dar seguimiento a lo discutido el 6 de febrero en la capital de Catar entre Meshaal, quien vive exiliado en Siria, y Abbas, también presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP).
Bajo aquel entendimiento, Abbas simultanearía de modo temporal sus funciones de presidente de la ANP con las de primer ministro, debido al rechazo de Hamas a que continúe en ese puesto Salam Fayyad, a quien tildan de pro-occidental.
Directivos de los islamistas y de Al-Fatah se opusieron al acuerdo, esgrimiendo, de un lado, que la ley palestina impide a Abbas desempeñar ambas funciones a la vez, y, del otro, falta de consenso sobre quiénes integrarían el gabinete.
En la reunión de ayer, Al-Fatah subrayó la importancia de que se permita a la comisión electoral retomar sus operaciones dentro de Gaza, de manera que Abbas pueda poner en marcha los procedimientos para formar el gobierno y fijar la fecha de los comicios, apuntó la fuente.
A su vez, Hamas consideró posible solucionar el asunto de la comisión electoral "mediante consultas con Abbas sobre la formación del gobierno que él dirigirá bajo los términos de la Declaración de Doha".
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| Prensa Latina |