PUTIN: MOSCÚ EXIGIRÁ GARANTÍAS A EE. UU. DE QUE NO DIRIGE SUS MISILES CONTRA RUSIA

En uno de sus primeros decretos, el nuevo presidente de Rusia, Vladímir Putin, sostiene que Rusia mantendrá su enfoque acerca del sistema antimisiles de EE. UU., exigiendo garantías firmes de que el escudo no va dirigido contra las fuerzas rusas de disuasión nuclear.

En el documento Putin se compromete a mantener las relaciones bilaterales con EE. UU. al nivel estratégico estableciendo una cooperación en pie de "igualdad", sin intervención mutua en asuntos internos y de respeto de intereses mutuos”.

Al mismo tiempo, el nuevo mandatario ruso se comprometió a seguir reduciendo las armas ofensivas estratégicas según lo previsto por el tratado bilateral firmado con EE. UU. en 2010.

Cooperación con la OTAN

El decreto de Putin, dedicado a la política exterior rusa, también establece la necesidad de colaborar con la OTAN en el desarrollo del polémico escudo antimisiles en Europa.

En el documento el presidente promueve el desarrollo de relaciones con la Organización del Tratado Atlántico Norte, siempre y cuando el organismo tenga en cuenta “los intereses de la Federación de Rusia en la esfera de seguridad y estabilidad estratégica” y “respete los principios básicos del derecho internacional”.

Relaciones con la Unión Europea

En su decreto Vladímir Putin establece como objetivo estratégico de Rusia la cooperación con el estado paneuropeo con vistas a “crear un espacio económico y humano común desde el océano Atlántico hasta el Pacífico”.

Además, el mandatario encomendó a la Cancillería rusa que llegue a un acuerdo con la UE sobre la mutua cancelación de visados para las visitas de corta duración. De esa forma, Moscú pretende fomentar el desarrollo del tratado de colaboración estratégica entre la Unión Europea y Rusia, así como desarrollar la cooperación en la esfera energética con el objetivo de crear un espacio energético europeo común.

El embargo a Libia toca a su fin

En el decreto de Vladímir Putin se constata la abolición del embargo de armas y de dinero a Libia impuesto en 2011 conforme a la resolución 1970 del Consejo de Seguridad de la ONU.

Ahora ya no se prohíbe la exportación de determinados tipos de armas, ni de las ayudas militares a los agentes libios destinadas a respaldar a las autoridades en su tarea por mantener la seguridad, así como a los miembros de la ONU, los medios y participantes de organismos humanitarios. Además, el decreto levanta el embargo económico que bloqueó las finanzas de entidades libias como el Banco Central o la Corporación Nacional de Petróleo.
RT