Un estudio realizado por la oficina del Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef, por sus siglas en inglés) revela que España registró las tasas más altas de pobreza infantil entre los países industrializados durante el período 2000 a 2010.
En este sentido, el estudio indica que el país europeo se encuentra entre los del ámbito educativo más bajo, debido al nivel de fracaso escolar, retrocediendo en su puesto de bienestar infantil, el cual mantuvo durante la primera década del siglo XXI.
Asimismo, agrega que la tasa de pobreza infantil en España se sitúa en el 20 %, calculando la cifra de menores que viven en familias con ingresos inferiores a la mitad de la media nacional.
Además, el informe advierte de que la tasa de jóvenes, de entre 15 y 19 años, que ni estudia ni trabaja en España, ha crecido del 7 al 13 % en esa década y, en especial, desde 2007.
En este contexto, el responsable de Políticas de Infancia de Unicef en España, Gabriel González Bueno, recomendó el miércoles a los dirigentes escolares que “mantengan las becas de comedor o que garanticen que al menos una vez al día los niños puedan tener una comida completa”.
Unicef evalúa el bienestar infantil con indicadores, como: el bienestar material, la salud y la seguridad, la educación, las conductas y riesgos, y la vivienda y medio ambiente.
Por último, el informe aclara que Países Bajos se sitúa en el primer puesto, teniendo en cuenta los indicadores del bienestar infantil, seguido por Finlandia, Islandia, Noruega y Suecia. Igualmente, subraya que entre el nivel de renta de los países y el bienestar general infantil no existe relación alguna.
