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El Presidente del Pontificio Consejo para las Comunicaciones Sociales, el arzobispo Claudio María Celli, llamó a todos los católicos a evangelizar las redes sociales y consideró que en Internet se reactualiza el pasaje del Evangelio en el que ya Jesús dijo que “el reino de Dios se parece a la red”.
“El problema no es repetir o transmitir solamente citas del Evangelio, esto lo podría hacer también una computadora, sino que lo que buscan hoy los hombres, es un testimonio de vida y, aquí está para nosotros el desafío fundamental. Dar un testimonio de vida y darlo con un lenguaje que los hombres y las mujeres de hoy pueden comprender”, animó.
El Pontificio Consejo para las Comunicaciones Sociales se reunió del 19 al 21 de septiembre, para celebrar su asamblea plenaria sobre el tema “La red y la Iglesia”, que tiene el objetivo de desarrollar una estructura comunicativa que refleje las distintas dimensiones de la Iglesia en relación a la red de redes.
Para dar inicio a las reuniones Celli recibió en la Sala Pio X del Vaticano a un gran número de representantes de los principales medios de comunicación católicos en el mundo, quienes intercambiaron ideas y opiniones acerca de la estrategia de comunicación de la Iglesia a través de las redes sociales.
Una nueva cultura
Para nosotros, continuó Mons. Celli, “se trata de tomar conciencia cada vez más de que las nuevas tecnologías comunicativas no son solamente un instrumento en nuestras manos, sino más bien que las nuevas tecnologías han dado origen a una cultura, a un ambiente de vida… y la tarea de la Iglesia es ver cómo es el contexto de la red donde viven y habitan centenares de millones de personas”.
“Nuestro problema es ver en qué medida, con qué forma, con qué mensaje, la Iglesia puede y debe anunciar el mensaje de Jesús, anunciar a Jesús, el mensaje de la red… hay lugares en donde se percibe profundamente este cambio, que es un cambio que nos obliga a todos nosotros a reflexionar y a darnos cuenta de lo que está aconteciendo en el mundo de la comunicación. Así que el problema nuestro fuerte, es ver cómo la Iglesia es capaz de dialogar respetuosamente con todos”.
“Vivimos en una sociedad multicultural, multirreligiosa, y la Iglesia tiene que ser consciente de tener en sus manos el mensaje de Jesús, que nos repite a todos nosotros: ‘Yo soy la Verdad, la Vida’. Pero vivimos en un contexto de muchas verdades”, concluyó.
