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Creyentes ortodoxos con velas con el "fuego sagrado", encendidas el día de Pascua en la Iglesia Ortodoxa del Santo Sepulcro en la Ciudad Vieja de Jerusalén y trasladado a Letonia, en un servicio de la Pascua ortodoxa en Riga el 14 de abril 2012.
A la ceremonia especial en la Iglesia del Santo Sepulcro, construida en el sitio donde Jesús fue crucificado y sepultado, asistieron peregrinos cristianos y clérigos vestidos con sus ropas ceremoniales en medio de la presencia de la policía israelí, las fuerzas de prevención de disturbios y los guardias de seguridad en la frontera.
"Estoy aquí porque me gustaría ver la semana de Pascua en Tierra Santa, porque creo que es una experiencia única", dijo a The Associated Press Nerea Craditotto, un peregrino español. Iglesias ortodoxas orientales y otras celebran la Pascua el domingo.
Los cristianos y el clero estaban de pie cerca de la zona de la tumba encendiendo sus velas y luego pasando la llama a otras personas haciendo cola en los pasillos fuera de la iglesia. El Fuego Sagrado es venerado por muchos como el poder de la resurrección de Jesús y el fuego de la zarza ardiente del Sinaí como se menciona en el Antiguo Testamento.
Los cristianos ortodoxos dicen que el milagro del Fuego Santo ocurre todos los años el día antes de su Pascua. El milagro se ha documentado cada año por más de 1.000 años. Los cristianos en muchos países, incluidos Georgia, Grecia, Ucrania, Rusia, Rumania, Belarús, Bulgaria, Chipre, Líbano y Egipto, ven la ceremonia en directo por televisión cada año. Después de la ceremonia, el Fuego Santo es llevado a algunos de estos países.
La ceremonia del Fuego Santo suele comenzar al mediodía con una procesión que implica el canto de himnos por parte de los clérigos que toman tres rondas de la iglesia. El patriarca ortodoxo de Jerusalén u otro arzobispo ortodoxo después, ofrece una oración, se quita el manto y entra solo en el sepulcro después de haber sido examinado por las autoridades israelíes judías para demostrar que no tiene nada para encender el fuego.
A la espera del Fuego Sagrado, la congregación canta el Kyrie Eleison, o "Señor, ten piedad." Cuando el patriarca sale de la tumba, ofrece oraciones y distribuye las llamas a la congregación.
Algunos peregrinos han afirmado que las llamas del Fuego Sagrado no queman el pelo, la cara o la ropa durante los primeros 33 minutos de su aparición.
El domingo, el patriarca latino de la Iglesia Católica Romana en Jerusalén llevó a cabo una misa de Pascua en el Santo Sepulcro. Los protestantes asistieron a un servicio de la mañana en el jardín de la tumba en las afueras de la amurallada Ciudad Vieja de Jerusalén.
