Sus ataques siempre son los mismos, utilizan la fuerza e incluso armas de fuego contra los palestinos autóctonos. La presencia de colonos en tierra palestina ha aumentado un 189 % en los últimos 12 años.
Los colonos controlan gran parte de los recursos naturales palestinos, entre ellos el agua. De manera casi sistemática, cada vez que un intento de paz se inicia, los colonos atacan violentamente a los palestinos, muchos de los cuales terminan en el hospital, como es el caso de Akram ‘Oude, campesino del pueblo de Qasra’, en Naplusa. Los colonos le atacaron a él y a su familia, con ayuda del ejército israelí.
En la ocupada Cisjordania, los palestinos no solo se enfrentan a las políticas del régimen de Israel, que apuntan a la construcción masiva de nuevos asentamientos para colonos, sino también a los continuos ataques de dichos colonos armados y apoyados por el ejército israelí.