La que fuera la estadounidense más joven condenada a muerte, salió en libertad

Una mujer condenada a muerte cuando tenía 16 años, libre 27 años despuésLa que fuera la estadounidense más joven condenada a muerte, Paula Cooper, salió este lunes de la prisión de Rockville, en el estado de Indiana, según informan medios estadounidenses.
Cooper había sido sentenciada a la silla eléctrica en 1986 a los 16 años por el asesinato de una maestra de religión. Hace años, su condena a muerte fue conmutada y tuvo la posibilidad de recuperar la libertad anticipadamente.
En su momento, millones de personas protestaron contra la pena de muerte impuesta a Cooper. También el papa Juan Pablo II intercedió por la joven directamente ante el gobernador Robert Orr.
El nieto de la mujer asesinada, Bill Pelke, se convirtió en el principal aliado de la condenada. Hace años que tomó contacto con Cooper, la perdonó y ahora quiere ir con ella de compras y a comer, indicó la emisora CNN.
En 1985, con 15 años y bajo la influencia de la marihuana, Paula Cooper planeó junto con otra adolescente el robo a Ruth Pelke, de 78 años.
Cooper tenía un cuchillo de cocina y apuñaló 33 veces a la mujer, según documentos judiciales. El botín fueron apenas diez dólares.
En 1988, la Corte Suprema de Estados Unidos prohibió la ejecución de asesinos condenados, que en el momento del hecho tenían menos de 16 años.
El alto tribunal de Indiana conmutó la pena de muerte en 60 años de prisión, con la posibilidad de reducir la condena en el caso de buena conducta.
LaVanguardia