76 senadores de EE.UU. enviaron una carta al presidente Barack Obama solicitándole que refuerce las sanciones contra Irán y considere la opción militar. La filtración del documento coincide con la investidura del nuevo presidente iraní, Hasán Ruhaní.
"Creemos que hasta que no veamos una ralentización significativa de las actividades iraníes nucleares, nuestro país debe endurecer las sanciones y reforzar la credibilidad de la opción del uso de la fuerza militar, paralelamente con explorar plenamente una solución diplomática en nuestra disputa con Irán", dice la carta filtrada este sábado por varios medios estadounidenses.
Se la enviaron al presidente Obama hace unos días, en vísperas de que la Cámara Baja aprobara un nuevo paquete de sanciones contra las industrias petrolera y minera de Irán. El Senado votará estas sanciones en septiembre, después de volver de las vacaciones de verano.
"En el pasado Irán ha usado las negociaciones para ganar tiempo. Actualmente continúa con la instalación intensa de centrifugadoras avanzadas. Esto muy pronto lo pondrá en la posición de poder fabricar armas nucleares. Tenemos que entender muy rápidamente si Teherán está dispuesto finalmente a negociar en serio. Irán debe comprender que el período de la diplomacia está llegando a su fin", puntualiza el documento. En su carta los senadores acentúan, además, que es muy poco probable que la llegada de Ruhaní al poder, a pesar de su reputación de político moderado partidario de la colaboración con Occidente, pueda hacer avanzar las negociaciones. "En todo caso, es Jamenei [el ayatolá Alí Jamenei, el líder supremo espiritual del país] quien lo decide todo", subrayan.
Quienquiera que sea el presidente de Irán es muy poco probable que sea capaz de mejorar las relaciones con EE.UU., comentó a RT el analista político Seyed Mohammed Marandi. "Los iraníes son muy escépticos sobre si los EE.UU. realmente quieren resolver el problema", puntualizó.
La ceremonia de investidura de Ruhaní tendrá lugar este domingo. Estarán presentes invitados extranjeros procendentes de más de 50 países, incluidos varios altos funcionarios de Latinoamérica, entre ellos el presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela, Diosdado Cabello. En un evento previo a la investidura celebrado este sábado en el que el ayatolá Jamenei ratificó a Ruhaní en el cargo, el presidente electo reiteró que sus principales objetivos son "rescatar la economía de Irán y conseguir una interacción positiva con el mundo". Subrayó que hará todo lo posible para acabar con las sanciones impuestas contra el país.
RT |