Los científicos han detectado el primer caso de la transmisión de un ser humano a otro de la nueva cepa de la gripe aviar en China.
Según un artículo publicado el miércoles en la revista British Medical Journal (BMJ), un hombre de 60 años de edad, que murió en un hospital en el este de China debido a la gripe aviar, transmitió aparentemente el virus a su hija.
La mujer de 32 años de edad se enfermó con la variante conocida como H7N9 poco después de asumir el cuidado de su padre y perdió la vida.
La revista explica que el padre contrajo el virus tras visitar un mercado de aves.
Hasta ahora no había pruebas de que el virus H7N9 se transmitiera entre personas que no estuvieran en contacto directo con las aves.
La investigación no sugiere que el virus podría desatar la siguiente pandemia, pero sí que levanta alarmas y enfatiza en la necesidad de mantenerse extremadamente vigilante.
El H7N9 se detectó a fines del primer trimestre de este año en el oeste de China. La sede regional en ese país de la Organización Mundial de la Salud (OMS) reportó al 30 de mayo 132 casos con 37 decesos.
