Cualquier ataque a Siria requiere de una respuesta contundente

PicLos embajadores de Irán, Rusia y Siria en El Líbano hicieron énfasis el domingo en la equivocación cometida por EE. UU., al tiempo que evaluaron la posibilidad de un ataque a Siria.
El embajador iraní en El Líbano, Qazanfar Roknabadi, se reunió por separado con los embajadores de Rusia y Siria en Beirut (capital libanesa), Alexander Zasypkin y Ali Abdul Karim Ali, respectivamente, encuentros en los que estudiaron los últimos avatares que tienen lugar en la región, en particular las amenazas antisirias del país norteamericano.

Ali Abdul Karim Ali hizo alusión al estado de ánimo y a la disposición total del Ejército y el pueblo de Siria a defender su patria, y agregó que “hablar sobre un ataque limitado, carece de sentido debido a las leyes internacionales, ya que cualquier ataque, incluso limitado, se considera una violación a la soberanía de un país y requiere de una respuesta contundente”.

De acuerdo con los documentos y pruebas existentes, los opositores armados apoyados desde el exterior utilizaron armas químicas contra mujeres y niños inocentes. “EE. UU. y el régimen israelí, antes de cometer tal error, deben revisar sus ecuaciones de cara a una etapa posterior”, advirtió.

Roknabadi, a su vez, afirmó que una solución pacífica y política para la crisis siria beneficia a todas las partes -citando las palabras del Líder Supremo de la Revolución Islámica de Irán, el ayatolá Seyed Ali Jamenei-, e indicó que el aventurismo estadounidense-sionista en la región les perjudica a ellos mismos y se asemeja a la explosión de un polvorín.

Asimismo, el embajador ruso en Beirut recordó la firme postura de Moscú de oponerse a cualquier ataque militar contra Siria y resaltó que, sin ningún lugar a dudas, los estadunidenses han cometido un error a la hora de hacer sus cálculos y, al parecer, “ya deben haberse dado cuenta de su equívoco”.

Estados Unidos, el régimen de Israel y sus aliados occidentales, entre ellos Francia y el Reino Unido, han adoptado la retórica de la guerra contra Siria, so pretexto del supuesto uso de armas químicas por parte del Ejército del país árabe en la zona de Guta, cerca de Damasco, capital siria, que supuestamente dejó el pasado 21 de agosto miles de muertos.

Esta acusación ha sido categóricamente rechazada por el Gobierno sirio, que ha argumentado que los que usaron ese tipo de armamento fueron los terroristas, provocando al menos 20 casos de asfixia entre los soldados gubernamentales.

Desde marzo de 2011, el país árabe se ha convertido en escenario de numerosos disturbios y enfrentamientos entre los opositores al Gobierno y el Ejército de Siria.