La justicia marplatense condenó a 50 años de cárcel a un hombre acusado de haber violado, abusado y prostituido durante años a sus cuatro hijas, aprovechando que las tenía a su cargo y que sus madres biológicas no convivían con ellas.
Los jueces del Tribunal Oral en lo Criminal Nº 1 Facundo Gómez Urso, Néstor Conti y Aldo Carnevale, sentenciaron al acusado con la pena mayor para este tipo de delitos, que había solicitado la fiscal Andrea Gómez en su alegato. Las víctimas, que llevan el apellido de su padre -por eso no fue revelada su identidad-, fueron abusadas una de ellas desde los 9 a los 17 años; otra desde los 15 a los 17, una tercera desde los 8 a los 12; y la cuarta a los 11 años, todas en forma reiterada y simultánea, según pudo determinar la justicia.
Las víctimas prestaron testimonio ante el tribunal, las mayores personalmente y las más chicas por medio de los videos de la entrevista con la psicóloga en la cámara gesell, junto a otros 15 testigos que culparon directamente al acusado.
Tras escuchar el veredicto, la fiscal del caso Andrea Gómez señaló que "es un paliativo para estas chicas a las cuales se les modificó sus vidas. El abuso sexual infantil se ve satisfecho con esta condena. Es un paso importante para las víctimas porque se las escuchó sin reparos y pudieron describir todo lo ocurrido. Es mas que una sensación de satisfacción", indicó.
Al respecto agregó que "existe un alto porcentaje de abuso sexual intrafamiliar, asombrarían las estadísticas. En este caso fue impecable la actuación de la Comisaría de la Mujer en un momento importante de la causa que terminó con esta condena ejemplar".