Brasil: Río de Janeiro está militarizada por la visita papal

Río de Janeiro se transformará en una fortaleza para la visita de Francisco, tras la revuelta social que sacudió a Brasil en junio.
"Será la mayor operación policial jamás realizada en la historia de la ciudad", dijo a la AFP el secretario adjunto de grandes eventos de Rio de Janeiro, Roberto Alzir Dias Chaves.

Un total de "7.000 policías reforzarán a los 12.000 efectivos de la ciudad, sin contar a los 1.700 policías de élite de la Fuerza Nacional, los de la policía civil, de carreteras y la federal", precisó.

Las zonas turísticas y hoteleras, estaciones de metro y autobús serán vigiladas por la policía, así como las favelas consideradas más peligrosas.
"Será muy superior a la movilización (policial) que hubo en la JMJ de Madrid" de 2011, precisó Dias Chaves.

Las históricas protestas, convocadas a través de las redes sociales y que muchas veces terminaron en violencia, tuvieron su auge el 20 de junio, cuando más de un millón de brasileños -incluidos 300.000 en Río- manifestaron en todo el país para reclamar el fin de la corrupción y más inversiones en servicios públicos en vez de en el Mundial de fútbol de 2014.

"Estamos esperando un evento pacífico, pero estamos preparados para actos de violencia", subrayó Dias Chaves.

Más efectivos del ejército

El ejército brasileño reforzó por su lado sus efectivos, temeroso de que la visita del Papa, que nuevamente colocará al país bajo la luz de los proyectores, incite a los jóvenes brasileños a volcarse a las calles.

El Ministerio de Defensa, a cargo de la coordinación de seguridad, preveía inicialmente el despliegue de 8.500 militares. "Pero el número fue aumentado a 10.266 hombres a raíz de las manifestaciones masivas de junio", dijo un portavoz de la cartera a la AFP.
Infobae