EE.UU.: Producción de petróleo y gas provoca terremotos

El número de sismos ha aumentado dramáticamente en EE.UU. en los últimos años, los científicos creen que la culpa la tienen las aguas residuales asociadas con la producción de petróleo y gas.

De acuerdo con un informe del Servicio Geológico de EE.UU., hubo más de 300 terremotos de magnitud superior a 3 desde el 2010 hasta el 2012, lo que significa un aumento de cinco veces en comparación con el número de terremotos observados desde 1967 hasta el 2000.

Los científicos estadounidenses suponen que el aumento del índice tiene que ver con las tecnologías actuales de producción de petróleo y gas. Según un estudio, publicado en la revista 'Science', hay una relación directa entre los terremotos y el 'fracking', fractura hidráulica que consiste en romper las rocas mediante la inyección de agua. El problema ocurre cuando el agua es salada o mezclada con varias sustancias.

La investigación demuestra que cuando las aguas residuales se depositan cerca de las fallas, hay más probabilidades de que haya terremotos. Si la presión del agua dentro de una falla se eleva lo suficiente, puede provocar la liberación de estrés tectónico en forma de terremoto. Incluso las fallas que no se han movido durante millones de años pueden deslizarse si las condiciones son adecuadas.

Los autores del estudio subrayan que la culpa no la tiene el propio 'fracking', sino las aguas residuales. Debilitan las fallas, por lo que un fuerte terremoto lejano, que golpee al otro lado del mundo, puede desencadenar sismos pequeños y de tamaño medio cerca de los pozos en EE.UU.

"Las ondas sísmicas actúan como la gota que colma el vaso, empujando las fallas que antes poco tenían que ver con terremotos", explica el investigador Nicholas van der Elst de la Universidad de Columbia.

Hay más de 30.000 pozos con aguas residuales en EE.UU. Se utilizan cada vez más, porque EE.UU. sigue aumentando la producción de gas y petróleo de esquisto, con la esperanza de realizar importaciones a Asia. EE.UU. está provocando "un desastre" ambiental, produciendo petróleo de esquisto que "tiene un altísimo costo ambiental", según advirtió recientemente el ministro venezolano de Petróleo, Rafael Ramírez.
RT