Miles de niños británicos están pasando hambre. Van incluso sin desayunar a las escuelas. La pobreza alimentaria crece día a día en el Reino Unido.
Niños acudiendo a la escuela hambrientos. Es un problema que uno no espera ver en uno de los países más ricos de Europa como el Reino Unido. Pero de acuerdo con el 85% de los cientos de los maestros encuestados por el diario Mirror, este es un problema que ha incrementado considerablemente en los últimos dos años. Los educadores también dijeron estar preocupados porque hay más niños que llegan sucios, con ropa que no les queda y que no es apropiada para las bajas temperaturas. Se estima que uno de cada siete niños británicos va a la escuela con el estómago vacío.
Adora tiene un niño pequeño y hace sacrificios para evitar que ése sea el destino de su hijo. Ella está en una situación de vulnerabilidad ante los drásticos recortes a los subsidios sociales.
Para muchos, el incremento en el número de niños pasando hambre se debe a los recortes al estado de bienestar social. El Gobierno se ahorrará 19 mil millones de libras anuales hasta el año 2015; en medio de una situación de disminución de salarios, incremento en el costo de la vida y una alta tasa de desempleo.
El secretario de educación, Michael Gove, ha culpado a "hogares caóticos" por el número de niños yendo a la escuela con hambre. Pero otros en el Gobierno parecen haber entendido la gravedad de este problema y el viceprimer ministro, Nick Clegg, ha anunciado que a partir de septiembre de 2014 habrá almuerzo gratis en todas las escuelas del país.
La situación de estos niños es tan sólo parte de un problema nacional: el incremento de la pobreza alimentaria. Organizaciones como la Cruz Roja han iniciado una campaña de recolección y distribución de alimentos para el Reino Unido, por primera vez desde la Segunda Guerra Mundial.