El jueves 29 de noviembre de este año en curso, la asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) votará una resolución para reconocer el Estado palestino como Estado observador de la ONU.
En este sentido, el representante palestino de la ONU, Ryad Mansur, ha declarado este martes en una rueda de prensa que su delegado intentará convencer “al mayor número posible de países para que voten a favor y el resultado debe ser respetado por todos”.
Asimismo, ha declarado Mansur, que el Estado árabe quiere terminar con la tragedia iniciada por el régimen de Tel Aviv. Por lo tanto, los mandatarios palestinos están dispuestos a negociar para encontrar rutas a la paz en la región. Mas, “no se atarán las manos” y exigirán el fin de la “política de asentamientos”, ha agregado el embajador palestino.
En esta misma línea, el Ejecutivo palestino ha subrayado que el pueblo palestino “se reservaría el derecho de usar su eventual estatus mejorado ante la ONU para acusar al régimen israelí ante la Corte Penal Internacional (CPI)”.
Caso de que el régimen israelí siga violando la ley, no respete las resoluciones del Consejo de Seguridad y construya asentamientos ilegales en los territorios palestinos, los gobernantes de Palestina consultarán con sus aliados las vías para forzar al régimen de Tel Aviv a respetar la Constitución internacional.
De momento Palestina cuenta con una gran mayoría entre los 193 Estados miembros de la ONU, y según ha precisado Mansur, el voto a favor del Estado palestino será respaldado por “al menos sesenta países”.
No obstante, en el mes de septiembre del año pasado, el Consejo de Seguridad rechazó la petición de Palestina para conformarse en Estado miembro de pleno derecho debido a la oposición de EE.UU. Por lo tanto, este año, el Estado árabe requerirá solo la aprobación de la Asamblea General para presentar un miembro observador ante la ONU.
Sin embargo, la portavoz del departamento de Estado de EE.UU., Victoria Nuland, ha manifestado que Washington tampoco está dispuesto a patrocinar la resolución de este año. Además se ha mostrado en desacuerdo con la posición de Francia, su más viejo aliado sobre el tema, que ha decidido votar a favor de ceder el estatuto de “Estado observador no miembro” al Gobierno electo palestino ante la ONU.
Mientras tanto, el régimen israelí lucha por variar la opinión de los Estados miembros de la Unión Europea (UE) sobre el derecho de Palestina a ser reconocida como Estado soberano e inclusive ha amenazado con defenestrar al presidente palestino, Mahmud Abás, si la Asamblea General de la ONU vota a favor del reconocimiento de ese país.
