Las armas químicas que poseen los terroristas Takfiríes presentes en Siria se convertirán, finalmente, en una seria amenaza para la humanidad, en particular para Occidente, ha anunciado este martes el presidente de la Comisión de Seguridad Nacional y Política Exterior de la Asamblea Consultiva Islámica de Irán (Mayles), Alaedin Boruyerdi.
Los países que han proporcionado esta tecnología (la fabricación de armas químicas) a los grupos takfiríes que operan en Siria deben rendir cuentas por sus actos, ha anunciado Boruyerdi, después de una reunión con Adnan Mansur, ministro libanés de Exteriores, en Beirut, capital libanesa.
"Nosotros informamos oficialmente a EE. UU. del acceso de los grupos takfiríes a las armas químicas hace nueve meses, pero el Gobierno de Washington no tomó ninguna medida al respecto", ha anunciado el legislador persa.
Boruyerdi ha advertido, además, de las consecuencias de un ataque militar contra Siria, afirmando que tal hecho podría desatar una nueva crisis en la región. “El régimen de Israel será el gran perdedor en esta crisis”, ha agregado.
Asimismo, Boruyerdi ha llamado a todos los países a tomar medidas para evitar un "gran desastre", y ha expresado su deseo de que el Congreso de EE. UU. actúe sabiamente en lo tocante a llevar a cabo un ataque militar contra Siria, después de la negativa del presidente del país norteamericano, Barack Obama, a adoptar medidas apresuradas para atacar el país árabe.
Obama ha declarado su intención de ordenar una acción militar contra Siria, sin tener en cuenta la decisión que tome la Organización de las Naciones Unidas (ONU) al respecto.
Boruyerdi se ha reunido también con el secretario general del Movimiento de Resistencia Islámica de El Líbano (Hezbolá), Seyed Hasan Nasrolá, y las dos partes han tratado los últimos acontecimientos en Siria y El Líbano.